Diálogo 4

Situación:

Carmen pregunta a Juan si le apetece dar un paseo, ir a ver a su amiga Petra en el centro o ir a la biblioteca. Juan está indeciso porque está preocupado por el tiempo y por cansarse mucho con el paseo. Al final, ambos deciden ir caminando hasta la biblioteca para devolver los libros de Juan.

Personajes:

Carmen: la cuidadora
Juan: residente
 
Lugar: el salón de la residencia
Carmen: Buenos días, Juan ¿cómo estás?
Juan : Buenos días. He tenido días mejores. Si tuviera más energía, podría pasear más a menudo.
Carmen: Bueno, podríamos pasear hoy. ¿Te apetece dar una vuelta? Podríamos pasear juntos si te apetece.
Juan : Es que la sección del tiempo de los periódicos dice que puede llover.
Carmen: Bueno, es posible que llueva, pero todavía no, porque ahora mismo no hay nubes.
Juan : Bueno, he visto a mi amiga Petra salir, va al centro y llevaba un abrigo. Yo creo que hace frío.
Carmen: Bueno, no hace frío, pero si quieres llevamos el abrigo. ¿Te lo busco?
Juan: Es que no estoy seguro si quiero salir o no.
Carmen : Bueno, como quieras, a mi me gusta mucho pasear contigo. Entonces si quieres podemos ir a la biblioteca para cambiar tus libros.
Juan : La verdad es que tengo que devolver los libros. Pero es que la biblioteca está tan lejos y no me gustaría estar cansado después.
Carmen: Bueno, podríamos hacer una cosa: vamos andando paseando hasta el Corte Inglés y allí vemos a tu amiga Petra. ¿Qué prefieres? ¿La biblioteca o el centro?
Juan: Bueno, la verdad es que tengo que ir a devolver los libros. ¿Tienes ahí mi carné de la biblioteca?
Carmen: Si, ya te lo he cogido, y también tu abrigo. ¿Quieres que te coja una bufanda?
Juan: Sí, por favor. Porque puede hacer frío y levantarse un poco de viento.
Carmen: Está bien, sí, el tiempo es tan cambiable…de pronto hace calor y de pronto hace viento. En Madrid y en primavera el tiempo es muy inestable.
Juan : La verdad que sí. Me gustaría vivir en sitio donde el tiempo fuera más previsible.
Carmen: …el Mediterráneo…
Juan: Ah, ¡estaría estupendo! Todo el día disfrutando del sol. Hasta podría intentar nadar.
Carmen: Pensaba que no sabías nadar.
Juan: Bueno, no lo sé, pero si hace buen tiempo podría intentarlo.
Carmen: Yo, si hiciese calor, montaría una heladería. A la gente con el calor le encanta los helados. Bueno, ¿listo para irnos?
Juan: Creo que sí… ¿has cogido mi carné de la biblioteca?
Carmen: Sí, lo he cogido el carné. Sin el carné no se pueden cambiar los libros.
Juan: ¿Y mis libros?
Carmen: Y tus libros están aquí que, por cierto, pesan bastante.
Juan: Lo siento. La próxima vez cogeré menos.
Carmen: No te preocupes, Juan, si los puedo llevar perfectamente. Si hubiese leído más libros de joven, ahora mismo sería médico.
Juan: No lo sé, pero como cuidadora eres estupenda.
Carmen: Muchas gracias, Juan. Bueno, ¿nos vamos?
Juan: Parece que todavía va a llover.
Carmen: Por eso llevo el paraguas. Con este tiempo nunca se sabe.
Juan: Sí, si lo hubiera sabido antes de que me casara, me hubiera ido a vivir a Valencia que hace siempre una temperatura ideal…
Carmen: ¡Vámonos!
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